Estudio de Signify ( Philips ) y la Universidad de Boston, la luz ultravioleta UV-C desactiva el Coronavirus SARS-COV-2

Estudio UVC ultravioleta Signify y Universidad de Boston

La luz ultravioleta UV-C desactiva rápidamente el coronavirus SARS-COV-2

Esto es lo que demuestra un estudio realizado entre la empresa Signify ( Philips ) en conjunción con la Universidad de Boston. Según este estudio, el SARS-COV-2, el coronavirus que provoca la enfermedad infecciosa COVID-19 se desactiva con gran rapidez con las dosis utilizadas en el laboratorio (La relación entre la luz ultravioleta UVC y la desactivación del coronavirus se ha demostrado ya en numerosos estudios realizados en distintos laboratorios a escala mundial)

Ante este brote vírico, el estado de alarma impuesto en muchos países y el confinamiento en los hogares fue uno de los métodos más eficaces para intentar frenar los contagios entre la población, pero no fue el único, ya que a partir de ahí se empezaron a realizar multitud de estudios y ensayos para desactivar el virus de forma efectiva en objetos y superficies, con el objetivo de disminuir su capacidad de propagación.

Uno de los estudios que más eco ha recibido ha sido el realizado por el fabricante Signify (Philips), sobre cómo actúa la luz ultravioleta UV-C en la capacidad de supervivencia del SARS-COV-2 cuando se expone a este tipo de radiación ultravioleta de forma directa.

 

Efectividad de la luz ultravioleta UV-C

La empresa Signify, junto con la universidad estadounidense de Boston, ha realizado una investigación concienzuda liderada por el doctor Anthony Griffiths sobre la mejor manera de desactivar el virus con una alta tasa de efectividad en el menor tiempo posible.

Para hacer los ensayos clínicos usaron diferentes tipos de objetos y superficies contaminadas con el agente vírico, y aplicaron de forma homogénea luz ultravioleta UV-C usando distintas intensidades para observar el comportamiento del virus frente a este tipo de estímulos.

 

Virus inactivado al 99%  en tan solo 6 segundos

El resultado fue asombroso, Griffiths demostró que aplicando unos pocos segundos de luz UV-C a diferentes objetos y superficies contaminadas, desactivaba el virus con una tasa de eficacia del 99%, ayudando a prevenir el contagio entre la población más vulnerable y ofreciéndonos nuevos métodos de lucha contra su propagación. 

En concreto, tras aplicar una dosis de radiación de 5 mJ/cm2 se consiguió una reducción de la concentración de virus SARS-CoV-2 de un 99% en tan solo 6 segundos, al ampliar la dosis a 22 mJ/cm2 el efecto de la desinfección fue de un 99,9999% tras 25 segundos de exposición a la luz UVC.

Una vez confirmado este resultado, podemos llegar a la conclusión de que las lámparas UV-C pueden ser usadas de forma profesional y efectiva para desactivar el coronavirus SARS CoV-2 en espacios cerrados con un coste mínimo, especialmente en espacios propensos a sufrir contagios como hospitales o recintos en los que puedan encontrarse pequeñas o grandes aglomeraciones de gente, como ocurre en los edificios empresariales, donde los trabajadores son los más expuestos al estar 8 horas compartiendo espacio con otros compañeros, o los centros comerciales o los restaurantes.

Otros estudios sobre la eliminación del coronavirus con radiación ultravioleta como este de la Universidad del País Vasco han llegado a conclusiones parecidas a las de Signify incidiendo además en que la utilización de lámparas ultravioleta para desinfección  para luchar contra el coronavirus es un método relativamente económico.

 

 

Recomendaciones de uso para aparatos de UVC

Si nos decidimos por comprar un aparato que emita luz ultravioleta UV-C (que es la más potente de los tres tipos que existen: UVA, UVB, UVC) para nuestra oficina o para cualquier otro espacio privado o público debemos tener en cuenta varias consideraciones y medidas de seguridad para un uso correcto. La eficacia de la luz UV-C contra los virus y otros patógenos no nos exime de un uso responsable de este tipo de aparatos para resguardarnos de sus efectos adversos:

  • La radiación UV es nociva para el cuerpo, por lo que debemos usarla sin la presencia de personas en los espacios donde queramos realizar una desinfección. (Nota importante: Los purificadores de aire con luz ultravioleta son dispositivos que sí se pueden utilizar en presencia de personas, la radiación ultravioleta en estos casos está aislada dentro de la carcasa del purificador de aire. Por otro lado, las lámparas de luz ultravioleta se emplean en sistemas de climatización de todo tipo de espacios cerrados y su uso no tiene por qué implicar ningún riesgo para las personas)
  • Las personas que utilicen los equipos con lámparas ultravioleta para desinfección de superficies deben estar cualificadas y formadas sobre los protocolos de protección necesarios.
  • No es recomendable usar este tipo de aparatos de desinfección de superficies de forma doméstica sin la adecuada formación e información, ya que un mal uso puede provocar problemas de salud graves, aunque existen determinados aparatos (como los que se usan para desinfectar móviles o llaves) que tienen un tamaño mucho menor y unas características aptas también para un uso doméstico seguro y sencillo.
  • Pero lo más importante es que NO podemos usar de forma directa luz UV-C sobre la partes del cuerpo más expuestas ante el virus especialmente, como manos o cara. Los efectos de este tipo de luz ultravioleta sobre la piel o la vista pueden ser nefastos en cuestión de segundos, por lo que debemos tener en cuenta que luchar contra este nuevo coronavirus es un reto y un objetivo para todos, pero que no debe serlo menos el hacerlo de forma segura y respetuosa con nuestra propia salud.
Compartir en Facebook
Compartir en Twitter
Compartir en Linkedin

Artículos interesantes